
[Veracruz México] La Unidad Técnica de Comunicación Social del Organismo Público Local Electoral (OPLE) de Veracruz que encabeza Mariana Contreras Viveros, quedó en evidencia al mostrar total indiferencia a la agresión que sufrió un fotógrafo que cubría el conteo de votos en las instalaciones del OPLE y fue violentado por elementos de la Policía Municipal.
El fotógrafo Rolando Ramos, colaborador de la agencia de noticias AVC, fue rodeado y amedrentado por policías municipales mientras documentaba manifestaciones ciudadanas en las oficinas centrales del OPLE. Los uniformados, además de intimidarlo, le exigieron borrar el material gráfico que había capturado y fotografiaron sus identificaciones oficiales, en una clara violación a la libertad de prensa.
De acuerdo con lo reportado por ese medio de comunicación, la situación se notificó de inmediato a la Unidad Técnica de Comunicación Social del OPLE. Sin embargo, lejos de actuar para proteger la integridad del comunicador o verificar los hechos, la respuesta de la responsable del área fue que “los comunicadores no deberían estar en la zona sin acreditación”. En ningún momento acudió personal de Comunicación Social a constatar la situación ni se mostró disposición a garantizar el derecho al trabajo de los medios ni la seguridad de quienes cubren las actividades del organismo.
Este acto de omisión se suma a otros episodios en los que la actual responsable del área de Comunicación Social ha buscado impedir la labor de medios de comunicación, lo que equivale a un acto de censura a la libertad de expresión.
En dos ocasiones se registraron situaciones que violentan el derecho a informar por parte del área de la unidad técnica de comunicación social de ese organismo; la primera vez intentó interrumpir el diálogo que se sostenía con la presidenta, bajo el argumento de que la consejera «tenía prisa», algo que en ningún momento expresó la presidenta que amablemente concedió la entrevista.
La segunda ocasión, nuevamente intentando frenar una entrevista que se desarrollaba con la presidenta del OPLE Marisol Delgadillo y aún cuando la entrevista se concretó, la titular de comunicación social Mariana Contreras, pidió ser notificada antes, argumentando que tenía que organizar los encuentros de la presidenta con la prensa y abrir espacios a medios de comunicación nacionales, ignorando el trato amable y abierto que la propia presidenta ha tenido con la prensa.
Es importante recordar que las áreas de Comunicación Social tienen la responsabilidad de facilitar la labor periodística y garantizar el acceso a la información pública, sin embargo, la actitud asumida por la funcionaria al frente de la comunicación social del OPLE, resulta preocupante por su falta de compromiso con la libertad de expresión y la seguridad de los periodistas.
En el caso del fotógrafo agredido, la intervención de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas (CEAPP) fue clave para resolver el conflicto. Mientras la CEAPP actuó, el OPLE permaneció ajeno a lo ocurrido, pese a que los hechos se desarrollaron en el área que está bajo su resguardo institucional.
Desde el inicio del proceso electoral el OPLE Veracruz mostró incapacidad para atender sus responsabilidades, aquí en resúmen: «Olvidaron» un paquete con 2700 boletas en los talleres de impresión ubicados en el estado de México; falló el simulacro del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP); por deficiencias de organización renunciaron funcionarios municipales de Xalapa; los debates electorales por streaming fueron un fiasco ante infinidad de errores técnicos; candidatos a jueces y magistrados infringieron las reglas durantes las campañas y el OPLE Veracruz fue omiso para sancionarlos.